Es muy típico que los niños hagan travesuras, tales como tocar el timbre de las casas y luego salir huyendo o lanzar huevos o tomates a las casas que no les entregan dulces en Halloween. Aunque son actitudes muy cuestionables por quienes son las víctimas de dichas bromas, sabemos que no representan mayor peligro o perjuicio para quienes reciben las travesuras.
Y de esto se trata la nota del día de hoy, pues actualmente, existe un hombre que desearía no haber presenciado una “travesura” que lejos de ser inocente, causó mucho daño. Es más, este acto ya no puede ser calificado de “travesura” ya que es un delito a la propiedad ajena. El hombre en cuestión, fue testigo de un niño que rayaba autos a plena luz del día y como se atrevió a interferir los defensores del “travieso” niño lo han llamado incluso abusador.
Mientras este hombre paseaba, vio a un menor de aproximadamente 13 años rayando autos estacionados en un parque con una llave. Al ver la actitud muy incorrecta y reprochable, el sujeto se acercó al niño para llamarle la atención y explicarle que no tenía que hacer eso.
Sin embargo, jamás imaginó que el menor reaccionaría con furia y comenzaría a insultarlo. El escándalo fue tan grande que algunos testigos empezaron a grabar la situación que dejó en evidencia cómo el menor pasó de los gritos a los empujones y puñetazos, lo que provocó que el hombre perdiera la paciencia por completo.
Después de caer, el niño empezó a llorar de inmediato y profirió gritos histéricos y otros insultos contra otros adultos presentes. Posterior a la viralización de las imágenes, las redes sociales , por supuesto, se dividieron ya que si bien algunos calificaron al niño de “sociópata” otros critican al adulto por haber usado fuerza contra un menor aunque él haya justificado que fue para apartarlo luego de que el niño empezara a tener un ataque de ira y a darle puñetazos a él.
Este es el vídeo:
