Los niños y las mascotas pueden tener de las relaciones más puras, bellas y duraderas de toda la vida. Si bien no todas las razas de perro son ideales para los niños (principalmente por diferencias de tamaño), la mayoría son aptas y forman un lazo inigualable que continúa por toda la vida.
Tanto niños como perros son muy similares en actitud y requieren de atención constante, muchas horas de sueño y de juego, bastante comida y educación. Así como un cachorro, los niños pueden ser testarudos a la hora de enseñarles a no molestar. Aprenden de a poco.
Por eso puede que se lleven tan bien. Incluso confían el uno en el otro para protegerse de malignos seres como la aspiradora.
Puede parecer raro, pero esta niña le teme a la aspiradora aún más que el perro. Mientras el animal se sienta tranquilo en una esquina esperando que la limpieza termine, su fiel amigo corre a esconderse detrás suyo para que le resguarde del ruidoso aparato.
Mientras más se acerca, la niña abraza más al husky como pidiéndole que no la deje sola frente a esta horrible amenaza.
Es divertido y tierno, pero especialmente es un recordatorio de lo bellas que son las relaciones entre los niños y los animales.