Su Rostro Lo Dice Todo: Ella Es La Novia Más Triste En Su Propio Matrimonio

Es menor de edad y tuvo que pasar por la terrible experiencia que le quitó su alegría por la vida.

Se supone que contraer matrimonio debe ser una opción personal y el día más feliz de tu vida. Eres tú quien decide con quién compartir tu vida y sea una buena o mala desicion es tu libertad de elegir.

Pero no todo es así a estas alturas de la vida. Existen muchos casos que actualmente se dan donde niñas se ven obligadas a casarse por conveniencia de las familias.

La chica de las imágenes es una de ellas. Una niña inocente que se convierte en el premio de los nefastos acuerdos entre familias y debe acatar las órdenes de sus mayores. Son víctimas de la cultura de su país.

Kheda Goilabiyev tiene recién 17 años y a pesar de verse hermosa como novia, no puede ocultar la  tristeza. Ella está celebrando sus nupcias con un jefe de policía de 47 años que amenazó a toda su familia con matarlos o secuestrarla a ella, si es que no accedía a casarse con él. Acá no hay amor, simplemente un capricho de un hombre adulto sin ningún respeto por nadie.

Nazhud Guchigov es el jefe de policía de la República de Chechenia. Según los informes, él ya tiene una esposa y un hijo que es mucho mayor que Kheda. Al parecer, los padres de Kheda no aprobaron la unión, pero no tuvieron otra opción cuando el jefe de policía amenazó con secuestrarla si se oponían.

Fue un controvertido matrimonio. Al darse la noticias, el público estaba indignado al escuchar al comisionado para los derechos de los niños de Moscú, Pavel Astakhov, quien directamente apoyó públicamente ese matrimonio al comentar que: “Las mujeres caucásicas ya están arrugadas a los 27 años”.

Además, claramente Guchigov hizo abuso de poder para casarse con la niña ya que muestra que ese matrimonio no se basa en el amor, la confianza y la compasión y está violando los derechos de Goilabiyeva como persona.

Cuando estas jóvenes se casan y pierden todo derecho, no tienen poder de decisión y seguirán dependiendo de sus maridos mayores. Se ven forzadas a convertirse en esposas y madres sin siquiera quererlo.

Según datos de organismos internacionales, cada año, 15 millones de niñas son obligadas a casarse siendo aún niñas y adolescentes. Además se les niega salud, educación y oportunidad de desarrollarse profesionalmente.