Nunca nos podremos olvidar del escándalo que hizo Letizia en marzo pasado en la misa de Semana Santa, mientras estaban en la Catedral de Palma de Mallorca al impedir que se sacara una foto que se quería tomar su suegra con sus hijas, Leonor y Sofía. La situación quedó registrada en un video y fue la última gota que rebalsó el vaso, porque la relación entre la esposa de Felipe y los reyes eméritos ya estaba quebrada.
No sólo España quedó perpleja, sino todo el mundo, porque condenó el comportamiento de Letizia, llamándola mal educada y engreída con su suegra, la que le había enseñado todos los protocolos y que la ayudó a integrarse a la Corona, según fuentes cercanas al Palacio.
En un intento desesperado por hacer notar que todo estaba bien y que sólo se había tratado de una acción desesperada de Letizia por proteger a sus niñas, días después se mostraron todos como una “familia feliz” al ir a ver juntos al Hospital a ver al Rey Juan Carlos. Ahí, pudimos ver que Letizia le abrió sonriente la puerta del auto a Sofía.
La verdad es que nada de eso pudo disfrazar más el tenso ambiente que se vive actualmente en la Corona española. La mala actitud y el fuerte carácter de la ex periodista siempre están generando escándalos y polémicas que la familia real ya no puede negar.
Todo sucedió durante una ceremonia en la basílica de Covadonga para conmemorar el centenario de la coronación canónica de la virgen de esa localidad. Felipe y las infantas Leonor y Sofía se acercaron al altar y se persignaron, tal como dicta la norma por respeto y devoción católica; sin embargo, Letizia se negó y se quedó unos pasos atrás.
Si bien no parece algo tan grave, de verdad sí lo es porque es un rechazo tácito a las tradiciones católicas. De acuerdo a la Revista Vanity Fair España, Letizia dice que es atea y no sigue ningún rito religioso. Por supuesto que no habría problema en cualquier otra parte del mundo y en cualquier otra posición, ya que en la actualidad existe la libertad de culto y cada uno decide qué religión sigue. No obstante, todo esto ha generado mucha polémica y controversia ya que estamos hablando de la monarca de España, la familia real más católica de todo el mundo, lo que quiere decir que está rechazando la base de las creencias de su familia.