A todos quienes vimos y lloramos con el filme italiano “La vida es bella” está dedicado este artículo, pues recordamos con tanto cariño al pequeño protagonista de la historia, Giosuè Orefice, personificado maravillosamente por el entonces actor infantil Giorgio Cantarini. Una película que no se olvida jamás.
La película relataba la lucha de un padre por salvar a su hijo pequeño de las atrocidades que ocurrían en un campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial. En medio del terror y la muerte, el padre le ofrece a su hijo una perspectiva “divertida” y lúdica de lo que en realidad estaba pasando.
En la ceremonia de la Academia de 1998, la película ganó 3 premios Oscar, por la Mejor banda sonora, el Mejor Actor y por ser la Mejor Película Extranjera, además de muchos otros galardones internacionales.
El pequeñín que robó nuestro corazón sólo tenía cinco años de edad en ese entonces. Hoy tiene 25 años y ya es todo un hombre.
Giorgio vive en Estados Unidos e Italia y dos décadas después del estreno de la película del aclamado director Roberto Benigni, Giorgio continúa siendo actor.
Giorgio ha seguido su carrera en la actuación y no hay duda de que siempre será recordado por su primer papel en “La vida es bella”.
Seguramente este es un balde de agua fría para ti, porque te recuerda que 20 años pasan volando y que los pequeños crecen inevitablemente. Seguro nunca te cuestionaste qué fue de vida del pequeño protagonista de esta hermosa película.
