Alrededor del mundo las especies están desapareciendo para siempre a un ritmo insostenible, lo que además de ser una gran pérdida para la naturaleza, atenta contra el equilibrio de los ecosistemas.
Según un informe de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), hay 28.338 especies amenazadas de extinción en el planeta, lo que representa el 27% de las 105.732 especies evaluadas por la organización para encontrar indicadores que reflejen el peligro de extinción.
Según el grado de riesgo de una especie la IUCN creó categorías para medirlos, de mayor a menor serían:
- Extinta
- Extinta en estado silvestre
- En peligro crítico
- En peligro
- Vulnerable
- Casi amenazable
- Preocupación menor
Durante mayo de este año se creó una coalición de 500 expertos en biodiversidad de 50 países (IPBES) para generar conocimientos e informar a los legisladores del mundo con los datos que se necesitan para promover el desarrollo de sociedades conscientes del impacto ambiental.
Según la IPBES se necesitan “cambios revolucionarios” para combatir la crisis ecológica que se vive, ya que los datos recolectados por los expertos hay alrededor de 1 millón de especies amenazadas.
Por lo tanto, el reporte publicado por la UICN recientemente es lo más cercano a cifras reales de la situación actual.
Sin embargo, la UICN solo evaluó aproximadamente el 1% de las especies vivas, por lo que si las tendencias se mantienen en el resto de las especies, el problema crece increíblemente.
La caza y la pesca excesiva, así como la contaminación, la destrucción de los hábitats, el cambio climático y la introducción de especies invasoras son los principales factores de la amenaza.
Todos debemos contribuir para que este problema se solucione o por lo menos se detenga.