Todas quienes somos madres sabemos que incluso un viaje al supermercado con niños puede convertirse en un caos. Sólo tenemos que imaginarnos entonces lo que es un viaje en avión con niños pequeños
Aunque existen muchos niños que se duermen apenas comienza el viaje, otros son muy inquietos y es imposible mantenerlos en sus asientos. Pero esta mujer lo averiguó cuando ya estaba embarcada en el avión que la llevaría a su destino.
Ella pensó que lograría lidiar con sus 2 hijos en un viaje sin su marido. Su nombre es Becca Kinsey, de Dallas, quien aprendió de la forma más dura que viajar sola y con dos hijos pequeños de 2 y 5 años de edad es una hazaña compleja, pero además aprendió otra cosa: existen nobles corazones que le tenderán una mano cuando la vean superada por la situación.
Esta madre mantuvo un estrés constante durante el viaje, pero cada vez que estaba a punto de romper en lágrimas, dice que recibió la ayuda de alguna mujer en el vuelo.
Su pesadilla comenzó en el aeropuerto, cuando aún ni siquiera estaban cerca de abordar el avión: “Estábamos en la fila de seguridad, y yo estaba al borde de las lágrimas porque Wyatt gritaba y James estaba agotado”, escribió Becca.
No obstante, de repente, una mujer le cede su lugar para que pudiera hacer el trámite más rápido. “Sé cómo es” le expresó la buena samaritana. Felizmente sorprendida por su reacción, Becca agradeció el gesto y se adelantó para continuar los trámites con sus bebés.
Fue así como, después de llorar y gritar, el pequeño Wyatt se durmió justo antes de subir al avión y como estaba cargada de equipaje de mano más los niños, otra mujer desconocida le pidió que le entregara el equipaje, que ella lo llevaría para que se preocupara de sus hijos y se asegurara de subir al avión.
Afortunadamente, Becca pudo subir al avión, pero aunque parecía que tenía todo bajo control, el caos no cesó. El más pequeño de sus hijos se asustó cuando despegó el avión y comenzó a gritar y llorar nuevamente durante el vuelo mientras ella hacía todo lo posible porque dejara de llorar. Finalmente el bebé se durmió y ella estaba totalmente exhausta.
Sin embargo, una nueva mujer muy solidaria estaba por hacer su aparición:
“Cuando ya habían pasado más de 45 minutos de viaje, un “ángel” viene a la parte posterior y dice:‘ Parece que necesitas un descanso’ y carga a Wyatt en su regazo por el resto del vuelo”.
