Cuando vamos a un salón de belleza, nos consienten y nos dejan más bellas, incluso ordenadas, es por eso que cuando alguien está muy bien presentada se tiende a pensar que está “recién salida del salón”. Por eso y por muchas otras cosas más, es normal que muchas mujeres se sientan felices y renovadas luego de ir al salón de belleza. La verdad es que el cabello queda impecable, pero seguro nunca hemos pensado en que existen riesgos para nuestra salud si acudimos a un salón.
Nos referimos al síndrome del salón de belleza, un grave accidente que incluso puede provocar fuertes dolores de cabeza,, dificultad para hablar, debilidad, desmayos y otros síntomas peligrosos.
¿De qué se trata este síndrome?
El síndrome del salón de belleza es un tipo de desgarro arterial, que puede afectar a las mujeres cuando se lavan el cabello en el salón de belleza. Por muy agradable que sea acostarnos sobre el gran tazón y que nos masajeen el cráneo mientras nos lavan la cabeza, se trata del peligro más extremo que corremos al entrar a un salón de belleza.
La posición que adoptamos para recibir este procedimiento requiere la hiperextensión del cuello, lo cual, aplica presión en la arteria vertebral. Como resultado puede ser que ocurra un rompimiento en esta arteria, propiciando también la formación de un coágulo de sangre.
Los médicos usan el término “disección de la arteria vertebral” para describir el síndrome del salón de belleza y es ocasionado por la hiperextensión del cuello. El Dr. Peter Gloviczki, especialista de Mayo Clinic, afirma que el síndrome puede darse cuando el cuello no se sostiene correctamente durante el procedimiento y si permanece mal posicionado entre 10 y 15 minutos o más.
Este tipo de accidente, puede además implicar el padecimiento de un derrame cerebral. Aunque el riesgo es muy bajo, es algo que siempre debemos tener en cuenta.
Tampoco tenemos que descartar otros síntomas, por ejemplo, Elizabeth Smith, de 48 años, en San Diego, en los Estados Unidos, experimentó debilidad en la pierna y el brazo izquierdo después de un lavado de cabello en un salón de belleza. Y tan solo unas semanas después, estuvo al borde de la muerte por un derrame cerebral masivo. Por fortuna, sobrevivió, pero quedó con problemas en el equilibrio y la visión de por vida.
Por supuesto, el consejo de los doctores es poder fortalecer los músculos del cuello con ejercicios especiales. Además, de siempre pedir una superficie acolchada para acomodar el cuello en el lavabo cada vez que vayas a un salón de belleza. Ya lo sabes, es mejor prevenir.
