En el municipio de Tonalá, en el estado de Jalisco, México, un hombre robó una camioneta con una niña de 5 años en su interior. La policía recibió el reporte y comenzó a perseguirlo, por lo que el ladrón decidió abandonar la camioneta y entrar a una iglesia.
En el lugar se subió al techo y amenazó a la policía con lanzarse al vacío. Los oficiales lograron atarle una cuerda en su pierna antes que el hombre se lanzara. De esta manera quedó colgado por la parte exterior de la iglesia.
En ese momento un policía se acercó con un palo y la gente que presenciaba la situación comenzó a gritarle: “Dale, dale, dale, no pierdas el tino”. Ante esto, el policía comenzó a golpearlo con el palo y el ladrón terminó herido, lleno de sangre en su torso.
Luego del ataque, el hombre recibió atención médica y fue arrestado, acusado por robo de automóvil y sustracción de menores de edad.
Juan Antonio González, presidente municipal de Tonalá reconoció la labor de los policías al salvar la vida de la pequeña, sin embargo ordenó un procedimiento interno para sancionar al policía que atacó al asaltante.
“La escena que vemos donde un policía golpea mientras la gente canta es muy lamentable porque no podemos ser indiferentes ni normalizar los problemas que durante muchos años ha sufrido nuestro municipio”
Juan Antonio González, presidente municipal de Tonalá
“La Guerra contra el Narcotráfico”
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