Si planeas darle de comer uvas a tu bebé, te aconsejamos tener gatos en tu casa por mera precaución.
No hay duda de que uno de los mayores miedos que tienen las madres al comenzar la maternidad e que el retoño se les ahogue comiendo algún alimento. Más de una vez penamos en darle a probar una nueva comida a nuestro bebé, y la terminamos cambiando por miedo a que no pueda tragarlo bien y se ahogue.
Esta madre de una bebé de apenas 15 meses llamada April vivió una experiencia así que la dejó impactada: su hija se ahogó con uvas.
A pesar de que le dio las uvas trozadas, la pequeñita no pudo tragarlas y se terminó atragantando con ellas. Sin embargo, la vida de esta bebé pudo ser salvada gracias a dos animales: Simba y Pixie.
Mientras la mujer dormía, extenuada por el cansancio de las labores diarias, Simba y Pixie la vigilaban. A media madrugada, Pixie despertó a la madre y le avisó -sólo con sus maullidos- que algo estaba ocurriendo en el cuarto de la bebé.
La madre entró de golpe al cuarto de su bebé y la vio tosiendo y desgarrando, mientras se asfixiaba. De inmediato la desesperada madre la socorrió y gritó para que Mike, el padre, fuera a ayudarle.
La niña logró salvarse: expulso las uvas y luego se durmió como si nada.
Pero luego del incidente, su madre ha reforzado la vigilancia y el control sobre los alimentos que le da a su hija pues -como toda madre primeriza- su angustia aumentó demasiado tras el terrible evento.
Al menos Simba y Pixie siempre estarán ahí para velar por la seguridad de la niña.