Hay que tener algo especial para ser artista. Digamos, mínimo tener la personalidad para pararse ante varias -sino miles- de personas para cantar. Es algo único y místico que no todos tenemos, pero que todos valoramos.
Christina Kokonis-Viggers un día tomó el micrófono de una máquina de karaoke que estaba en una estantería del Sam’s Club de Nueva York. Ahí buscó la canción “Maybe this time” (del musical “Cabaret”, de 1972) y la interpretó frente a todos los clientes, dejándolos impresionados.
Christina normalmente canta en escenarios, pero esta fue una actuación espontánea hecha de puras ganas de encantar a la gente que a esa hora estaba en el Sam’s Club.
Amanda Lasher es la mejor amiga de Christina y fue quien registró el momento, para luego subirlo a Internet. La artista ni siquiera pensó en la repercusión que si video tendría: sólo esa misma noche, más de 2 mil personas ya lo habían visto.
La cantante no tiene formación académica, y todo se debe a su talento pero también a la constante práctica y al trabajo duro. Pronto, dice, espera llegar a cantar como Adele.
