A los perros les gusta el agua. Bueno, a la mayoría. Más bien podríamos decir que existe un amor-odio con él.
Sobretodo cuando son obligados a bañarse. Pero si se dejan solos, pueden mojarse y jugar con el agua sin probblemas.
Así lo veremos con esta husky del vídeo. Se llama Maya y descubrió que puede hacer algo con el agua además de beberlo: ¡aprendió a hacer burbujas!
De hecho, parece que puede aguantar la respiración debajo del agua.
Como si fuera una experta buceadora, esta perra puede controlar los tiempos, puede hacer pausas para respirar y luego soplar de nuevo en el agua.
Y en un minuto, llena de felicidad mira a su compañero como queriendo decirle “¡Vamos! ¡Inténtalo tú también!”
¡Qué entretenido!