Con la llegada de la pandemia del coronavirus la rutina de la gente ha cambiado rotundamente.
Las cuarentenas obligatorias y voluntarias y el número en alza de contagios han causado estrés en la población causando estragos en las rutinas de sueño y descanso.
Cuando todo empezó en China, el mundo no se imaginó que las consecuencias serían tantas en la salud, la educación, el trabajo y el ocio.
la falta de una vacuna, los contagios y fallecidos son preocupaciones en la actualidad y el distanciamiento social también genera efectos adversos pues tenemos estrés y preocupación constantemente.
El bombardeo de información tampoco ayuda contra eso, así como la suspensión de trabajo, educación, cultura y de actividades de diversión. Aparte de quedarnos encerrados en casa tenemos preocupación por el futuro económico, por nuestra alimentación y más.
Todo lo anterior afecta nuestro sueño.
El estrés de las cuarentenas y sus efectos en nuestro descanso
El presidente de la Academia Mexicana de Medicina del Dormir, el doctor Alejandro Jiménez Genchi dijo que todo lo que abarca la cuarentena afecta nuestro descanso nocturno.
“No salimos, no hacemos ejercicio, no nos trasladamos y caminamos poco, lo que produce un menor impulso de cansancio a la hora de dormir” dijo el doctor.
“La amenaza que significa el virus provoca que tendamos a estar en un estado de alerta y más despiertos. Esto produce una activación cognitiva desarrollada en el pensamiento y las emociones, generando ansiedad y temor”
Según el doctor la cuarentena alteran la rutina y nuestro comportamiento debido al abandono de horarios ya que no hay responsabilidades como el estudio o el trabajo.
Así se produce lo que el experto define como “El síndrome de fase retrasada” donde perdemos el control de nuestras horas de sueño y despertamos en diferentes horarios cada día. Esto a largo plazo puede generar insomnio crónico, interrumpiendo el sueño incluso cuando ya no estemos en cuarentena.
Para evitar lo anterior debemos establecer horarios de descanso para así poder dormir 7 u 8 horas y así poder retomar nuestras rutinas cuando la cuarentena se acabe.