Como mujer, seguramente debes pasar cada mañana frente a tu clóset con la pregunta existencial de “¿qué me pongo?”
Muchas han tenido que buscar la respuesta en un mar de ropa de todo tipo para decidirse finalmente después de mucho tiempo la mejor tenida del día… claro que luego de probarse como 100 combinaciones distintas.
Por eso es curiosa la decisión de la directora de arte en la agencia de publicidad Saatchi & Saatchi, Matilda Kahl, quien parece haber encontrado la luz al final del túnel y dio con la solución más efectiva que se pueda encontrar.
Ella empezó a usar el mismo atuendo de trabajo por tres años. Se trata de una simple blusa blanca y unos pantalones negros. Ambos se convirtieron en su marca personal y en su “uniforme”. Esto a pesar que tiene total libertad para vestir como quiera.
Sucede que descubrió (algo muy lógico) que así se ahorraba mucho dinero y, lo más importante, tiempo. Además, se liberó del estrés de elegir todos los días qué usar. Simplemente compró 6 pantalones negros de acuerdo a su figura y 15 blusas blancas cómoda y asentadoras, uno que otro accesorio sencillos y apenas tres pares de zapatos.
Según sus propias palabras “Yo pasaba más de una hora viendo qué ponerme todas las mañana y eso era muy frustrante. Incluso me quitaba tiempo de tomar el desayuno. Así que decidió elegir un uniforme para mis días laborales. Y ha sido la mejor decisión que he tomado”.
“Además lo complemento con uno que otro accesorio para hacerlo “diferente” agregó Kahl.
“Me he enfrentado a muchos retos en el trabajo, no necesito expresarme a través de cómo me visto. Prefiero estar enfocada con mi creatividad en mis proyectos laborales y no perder mucho tiempo en la ropa que debo usar”, finalizó.
Al principio dijo que sus compañeros de trabajo estaban un poco confundidos y su supervisor le ofreció un aumento creyendo que no podía comprarse ropa nueva.
El estilo de Matilda ha logrado atraer la atención de muchos, pero también recibe comentarios negativos en Instagram de personas que no entienden cómo siendo una chica tan atractiva no se esfuerza más por verse mejor.
Incluso le dicen si no se siente poco femenina.
La respuesta de ella sorprendente e inspira al mismo tiempo.
“Mi decisión me ayuda a ahorrar energía. Las personas creativas deben tomar muchas decisiones. Sacar la ropa de mis prioridades diarias significa que tengo algo menos de lo que preocuparme. El tiempo es muy valioso para estar desperdiciándolo en cosas innecesarias“.
Pero en su vida fuera del trabajo no precisamente se ve aburrida.
Los fines de semana, Matilda si usa atuendos más llamativos y muy femeninos.
Gracias a la popularidad que ha ganado, en su oficina crearon el “Día de Vestirse igual a Matilda” que se celebra el 23 de abril. Todos deben vestir como ella.
Luego de 3 años con ese estilo, Matilda se sigue sintiendo feliz y cómoda y no pretende cambiarlo en lo absoluto.
