Creyó Perder A Toda Su Familia En El Holocausto. 78 Años Después, Recibió Una Emotiva Sorpresa

Sus primeras palabras fueron “¡Eres igual a tu padre!

Al escapar de su natal Polonia en 1939, Eliahu Pietruszka iba a vivir la peor experiencia de su vida con el inicio de la Segunda Guerra Mundial.

En su interior guardaba la esperanza de poder reencontrarse con lo que quedaba de su familia en algún momento. El régimen nazi de Hitler había capturado y asesinado a sus padres y su hermano Zelig y sabía que su otro hermano Volf era el único que había logrado escapar del terror.

 

Sus caminos se perdieron. Eliahu decidió irse a vivir a Israel donde se casó pero nunca más tuvo noticias sobre su hermano; por lo que creyó que, finalmente, había muerto.

Pero resulta que recién hace unos días, Eliahu recibió una noticia que lo dejó helado. El hombre de 102 años supo que aún quedaban algunos de sus familiares con vida y que su sobrino iría a visitarlo pronto.

 

Lo que ocurrió es que, luego de la separación de los hermanos, Volf fue llevado por los rusos a un campo de trabajo en Siberia donde logró sobrevivir, y se quedó en Magnitogorsk, una ciudad industrial cerca de los Montes Urales.

Los nietos de Eliahu fueron quienes investigaron el destino de la familia de su abuelo y descubrieron que su hermano había fallecido en 2011 pero que su hijo Alexandre seguía viviendo en esa ciudad.

Después de conversar brevemente por Skype, acordaron que Alexandre iría a conocer a su tío a Israel.

La emoción del encuentro se podía palpar en el aire. Todos tenían lágrimas de emoción recorriendo sus rostros al ser testigos de este tan esperado día.

 

Eliahu cuenta que apenas vio a su sobrino reconoció la cara de su hermano. “¡Eres igual a tu padre! No pude dormir estos dos días esperando que llegaras”, le dijo.

Alexandre, en tanto, estaba sorprendido de la situación. No podía hablar y trató de mantener la compostura al conocer a su tío perdido. “Es un milagro lo que está pasando. Jamás pensé que viviría este momento”, confesó.

 

Y para Eliahu, este encuentro logró cerrar esa herida que llevó por muchos años. “Estoy muy emocionado. Esto demuestra que nunca es tarde y que las personas siempre pueden encontrar lo que han estado buscando. Yo lo logré“, dijo Eliahu Pietruszka.