Las personas que viven del esfuerzo ajeno y sólo se dedican a arrebatarnos lo que tanto nos ha costado comprar no estarán felices con esta nota. Son los delincuentes, quienes están dispuestos a hacer cualquier cosa para conseguir tus pertenencias. Para ello, usan diferentes trucos y esquemas sofisticados, que funcionan con muchísima efectividad si no tienes ni la más remota idea sobre ellos. Es por eso que el día de hoy te ayudaremos a no caer en sus trampas. Hoy te alertamos sobre estas 7 prácticas habituales de los ladrones por las que te conviertes en una presa fácil.
1. Distracción con la caída de un bolso o maleta
Uno de los delincuentes va delante de ti y, como si fuera un accidente, se le cae el bolso (o una maleta) justo a tus pies. Naturalmente, frenas bruscamente y tropiezas. Mientras tanto, su cómplice, rápido y decidido, saca el objeto de valor directamente de tu bolso. Todo sucede en unos segundos y pasará tiempo antes de que logres darte cuenta de la pérdida. Solución: mete el teléfono y la cartera en los bolsillos interiores de la ropa
2. ¡Comentario Halagador!
Estás sentado en un parque y lees un libro en paz y armonía cuando, de repente, se te acerca una persona y te dice: “¡Pero si este es mi autor favorito!“ o ”¡Qué abrigo más bonito! ¿Dónde lo compraste?” Te resultará amable y alegre, pero solo tiene un objetivo: distraerte mientras su cómplice ya se ha ido con tus pertenencias.
Solución: pasa tu mano a través de la correa de tu bolso o mochila y colócalo de tal manera que esté lo más cerca posible de tu cuerpo. O ponlo en el suelo, entre tus pies.
3. Se te cayó “dinero”
4. Objeto Distractor Que Cubre
Casi siempre los carteristas deambulan cometiendo delitos en zonas con gran afluencia de público. Gracias a esto, es mucho más fácil robar. Basta con cubrir la mano del delito con un periódico. Y en la multitud, en este caso, nadie lo notará, dado que todos tienen mucha prisa. Solución: una vez más, no pongas la cartera o los objetos de valor en la mochila
5. Delito cometido en equipo
Una forma segura de que te saquen las cosas de una mochila o bolso sin que te des cuenta es ir abriéndola lentamente. En primer lugar, pasa el primer delincuente, abre el bolso y luego aparece otro. Ese es el que sacará todas tus cosas de valor. Solución: trata de comprar mochilas y bolsos con cierre de cremallera invisible y ocultar el tirador. Un cierre de este tipo resulta difícil abrir de forma furtiva.
6. Pedir ayuda para llegar a un lugar
Estás sentado en la mesa de una terraza, se te acerca una persona diciendo que es turista y te pide ayuda para encontrar una ruta, calle o lugar. En ese momento, mientras estás tratando de ayudarlo, saca de tu bolsillo o de tu mesa el teléfono y la cartera. Solución: no cuelgues tu bolso en el respaldo de la silla y no pongas tus pertenencias sobre el borde de la mesa.
7. ¿Me sacas una foto, por favor?
Uno de los criminales pide que le saques una foto y te da la cámara. Muy a menudo, se trata de una cámara vieja o barata, para poder dejarla y salir corriendo en caso de necesidad. Colocas tu bolso en el suelo, pero te piden acercarte un poco más, hasta que tu bolsa quede a tus espaldas. Y es justo entonces cuando se comete el delito.
Solución: Si te han pedido que saques una foto, no sueltes tus pertenencias, pero si no te queda otrano lo olvides: siempre deben estar dentro de tu campo de visión.