Cuando la tan querida “Lady Di” salió de la residencia real Clarence House, el día de su boda, ese 29 de junio e 1981, todo el mundo esperaba expectante para ver a la princesa del pueblo con uno de los secretos mejores guardados del mundo de la moda, su vestido.
Es que el diseño y los detalles de la futura princesa, se mantuvieron en secreto hasta el momento de la ceremonia y, sin dudas, fue lo mejor que pudieron haber hecho, pues hasta nuestros días, su vestido es recordado como uno de los más magníficos de todos.
Hoy, a tan solo unos meses del vigésimo aniversario de su fallecimiento, es que queremos compartir contigo algunos de los secretos más emblemáticos de la princesa de todos y de su famoso vestido de novia.
1. El encaje era de la época de la Reina María
Gran parte del encaje de Carrickmacross usado para el vestido, vino de una bolsa de restos que fueron comprados en una subasta o de una donación de la Real Escuela de Costura, no se sabe con seguridad.
2. Su vestido casi no cabía en el carruaje
De acuedo a lo que el diseñador a cargo del vestido, David Emmanuel, Diana seguía pidiendo una cola más y más grande, por lo que el equipo practicaba cómo doblar la tela para que no se doblara, pero finalmente, gran parte del tafetán se aplastó dentro del carro de vidrio que la llevó a la Catedral de San Pablo. Elizabeth Emmanuel, co-diseñadora, afirmó el apretado viaje causó las arrugas visibles en su llegada.
3. El vestido tenía una pequeña mancha
De acuerdo a lo que comentó la maquilladora de la princesa, Barbara Daly, la princesa Diana había derramado un poco de su perfume Quelques Fleurs, en el vestido mientras se preparaba, pero simplemente se inclinó un poco hacia delante para que nadie lo notara.
4. Ella usaba algo viejo, nuevo, prestado y azul, de acuerdo a la tradición
Se dice que las novias deben llevar siempre en su traje, algo nuevo, algo viejo, algo prestado y algo azul, y Diana tuvo los 4. Lo nuevo, fueron las telas especialmente hiladas en una granja de seda británica, lo viejo era el encaje, lo azul era un pequeño lazo azul cosido en la pretina, y lo prestado era la tiara de la familia Spencer, una reliquia del siglo XVIII-
5. El velo superaba el tamaño de la cola
Para el diseñador era un hecho, el velo tendría que extenderse más allá del dobladillo del vestido y todo, fue anclado por su tiara. Se necesitaron 153 yardas de tul para el velo.
6. El vestido de Diana fue cosido ese mismo día
Es que, durante los 7 meses previos a la boda, la cintura de la princesa se encogió más de 5 pulgadas y seguía perdiendo peso, más tarde revelaría su constante lucha contra los trastornos alimenticios. Pero, debido a eso, se tuvo que diseñar 5 corpiños diferentes y finalmente, cosieron la versión final ese mismo día.
7. Seis meses se demoraron en hacer sus zapatos
A pesar de que sus zapatos fueron apenas visibles bajo el dobladillo de su vestido, los zapatos de Diana, fueron especialmente hechos y tenían 542 lentejuelas y 132 perlas que formaban un corazón. Incluso, las suelas que fueron pintadas a mano, tenían marcadas las iniciales C y D en el arco. Como detalle, Diana era casi más alta que su esposo, por lo que sus zapatos apenas tenían tacón….ella tenía que estar a la altura de su prometido, literalmente.
8. En caso de lluvia, tenía un paraguas que hacía juego
En caso de lluvia, la co-diseñadora Elizabeth Emmanuel, compró dos sombrillas de seda antiguas, las cubrió con tela blanca y otra con tela marfil, para que así nadie supiera cuál era la que hacía juego con el vestido, junto a algunas perlas, lentejuelas y encaje. Afortunadamente para todos, el paraguas que hacía juego no fue necesario. Pero, de acuerdo a las declaraciones posteriores de la diseñadora, “el paraguas estaba hecho de un material tan ligero que ciertamente no era impermeable, no le habría hecho mucho bien”.
9. El vestido de “respaldo” desapareció misteriosamente
10. Tenía un pin de herradura en el interior
A pesar de que nadie podía verlo, los diseñadores unieron un pin de 18 kilates tachonado con diamanes blancos en la etiqueta del vestido. La Reina Elizabeth, accidentalmente dejó un pasador de seguridad y lo recordó el día siguiente.
Sin dudas, la boda de Lady Diana y el Príncipe Carlos, fue uno de los eventos más importantes y recordados del siglo pasado y su vestido jugó un papel clave, ¿sabías los secretos que escondía?