A la mayoría de nosotros nos ha pasado que despertamos con un dolor muscular en el cuello que nos tortura con cada movimiento. En algunos casos es más intenso que en otros, pero todos lo hemos padecido y estamos hablando de la tortícolis. Las principales causas son una mala posición del cuello durante la noche, demasiado esfuerzo en el gimnasio o simplemente un estrés intenso que engarrota los músculos.
Quienes lo han vivido saben que la solución ideal para poner fin rápidamente al sufrimiento es usar un collarín ortopédico; sin embargo, existen otras soluciones menos restrictivas para remediar este inconveniente.
1. Calor
Sabemos que el calor relaja los músculos, por ende, alivia los desagradables dolores musculares. Nota: te aconsejamos usar calor seco, como por ejemplo un pañuelo de lana.
2. Frío
Paradójicamente, el frío también puede ayudar a aliviar el dolor. Sólo se debe aplicar paquetes de gel o cubitos de hielo frescos empacados en una toalla limpia al área dolorida 3 veces al día durante 3 a 5 minutos cada sesión. IMPORTANTE: se debe usar este método solo el primer día de tratamiento; el uso prolongado puede tener el efecto opuesto al deseado.
Un masaje suave con la ayuda de un gel antiinflamatorio siempre proporciona un resultado relajante y efectivo, por lo que ésta es una excelente oportunidad para combinar trabajo con placer. Sin embargo, asegúrate de que la persona que te da el masaje tenga experiencia o existe la posibilidad de que hagan más daño que bien.
4. Col verde
Se debe sumergir las hojas de col verde en agua tibia y aplicarlas en el área dolorida.
5. Aceites esenciales
Masajea la piel con una mezcla de aceites esenciales de hierba de San Juan o estragón y aceite de oliva, 3 ó 4 veces al día. Se debe tener en consideración que estos aceites no deben usarse en niños menores de 3 años ni en mujeres embarazadas.
6. Relajación
El estrés es una de las razones por las que aparece la tortícolis, así que trata de encontrar momentos de relajación total y trata de no pensar en tus problemas. También puedes practicar meditación o yoga para ayudar a aliviar la presión.
7. Gel analgésico casero
Es posible que realices un gel natural hecho en casa que aliviará tu dolor. Para hacer esto, derrite 1 cucharada de cera de abejas en un recipiente con agua tibia, agregando 2 cucharadas de aceite de coco, 5 gotas de aceite esencial de eucalipto y 5 gotas de aceite esencial de menta. Una vez que este gel se haya enfriado, puedes aplicarlo a tu cuello.
Ya sabes que si desafortunadamente llegas a sufrir de tortícolis y te conviertes en víctima de este dolor, puedes recurrir a estos métodos para aliviarte de manera eficaz. Si el dolor persiste o se intensifica, te aconsejamos que consultes a tu médico lo antes posible. Nunca olvides que debes consultar siempre con tu médico de cabecera.
