Shelia Fedrick, una tripulante de cabina de Alaska Airlines se dio cuenta de que una adolescente se encontraba sentada al lado de un hombre bien vestido. Y cada vez que ella se acercaba, la chica no la miraba y -al contrario- se encontraba en un estado físico bastante extraño.
Fedrick ha trabajado como tripulante de cabina por muchos años y, durante toda su carrera, ha debido enfrentarse a varias extrañas situaciones, y esta vez le tocó un caso extremo.
Fue gracias a su expertiz que Shelia le salvó la vida a una indefensa chica de 14 años que había sido raptada por un traficante humano.
Según le contó la azafata a NBC, la chica se veía muy demacrada y usaba ropa bastante vieja, completamente opuesto al hombre que la acompañaba, alguien “muy bien vestido”.
Se advertía fácilmente que la muchacha había pasado por el “literal infierno”, y eso llamó la atención de la mujer. Al poco rato, notó que la chica había dejado un mensaje en el baño donde pedía ayuda, así que Shelia no dudó en comunicarle todo al capitán del avión para que la policía estuviera esperando al hombre luego del aterrizaje.
He sido tripulante de cabina por 10 años, y esta experiencia ha sido como cuando recién comencé a entrenar para mi puesto. Jamás imaginé algo así.
Hasta el día de hoy, la mujer mantiene contacto con la chica que salvó.
Luego de que este evento sucediera, 100 tripulantes de cabina fueron enviados a Houston para recibir un entrenamiento y ser capaces de reconocer situaciones que puedan involucrar tráfico humano.
En el curso les enseñaron a buscar las señales de alerta que Shelia Frederick vio, como por ejemplo personas que insisten en hablar por la víctima o que aparentan estar drogados.
Shelia, además de azafata y heroína sin capa, es modelo y ha trabajado como extra en HBO, además de aparecer en la revista Ebony. EN su perfil de Star Now, se describe como alguien que ama sonreír y estar rodeada de personas, y es por eso mismo que le gusta ser tripulante de cabina.