Luego de la muerte de la princesa Diana, el príncipe Carlos se convirtió en padre soltero. Entonces, William y Harry tenían 15 y 12 años, respectivamente. Y aunque Carlos procuró los mejores cuidados para sus hijos, nunca pudo eclipsar la figura de su difunta madre.
Durante las grabaciones de un documental que conmemoraría el vigésimo aniversario de la trágica muerte de Lady Di, sus dos hijos fueron invitados a hablar sobre su extraordinaria madre, la princesa más querida de la historia.
Los hermanos compartieron varios recuerdos, pero en ninguno de ellos se asomaba la figura de Carlos, por lo que el príncipe quedó muy dolido.
Pese a que los príncipes dijeron que no tenían muchos recuerdos de su madre, todavía sienten el profundo impacto que dejó su pérdida en sus vidas. Ella, cuando eran niños, les ayudó a crecer y tener un futuro decente. Muchas de sus lecciones las recuerdan hasta el día de hoy.
En las entrevistas, ni William ni Harry mencionaron a su padre, el príncipe Carlos, en sus recuerdos de infancia. Y aquello le hirió bastante.
“Habría sido agradable si le hubieran reconocido su contribución en la crianza. Él era, y trata de ser, un buen padre, después de todo”, le dijo al Daily Mail una fuente cercana a la familia.
Carlos fue quien cuidó a los chicos luego de la muerte de Diana. La única vez que Harry mencionó a Carlos, fue justamente para hablar de aquella etapa.
“Una de las cosas más difíciles que tiene que hacer un padre es decirle a sus hijos que su madre ha muerto, pero él estaba allí para nosotros, él fue nuestro soporte. Y trató de hacer todo lo posible para asegurarse de que estuviéramos protegidos y atendidos”, declaró el príncipe.
En el documental de Diana también se excluyó al príncipe Carlos al escoger su fecha de publicación: en lugar de elegir el 31 de agosto, el aniversario de bodas de la pareja, se optó por el 1 de julio, día de cumpleaños de Diana.
Además, ese día Carlos no pudo asistir al estreno por estar en un viaje por Canadá junto a Camila Parker-Bowles.
Quizás dentro de las razones de los príncipes está todo lo que debieron sufrir al encontrarse en medio del fuego cruzado que significó la separación de sus padres, en 1992.
Desde entonces, fue su padre quien les indujo a cumplir sus deberes reales, mientras Diana les mostraba una vida ordinaria llena de cafeterías y parques entretenidos.
Penny Junor, biógrafa real, señaló que el príncipe de Gales nunca fue un padre ausente como tal, pero que pasó poco tiempo con los chicos debido al número de compromisos que debía atender en honor a su cargo.
“Eso no es producto de una falta de amor, es producto del hecho de que estuvo tan centrado en su trabajo, y en la necesidad de hacer una diferencia en el mundo que, como muchas personas que están tratando de hacer una diferencia en el mundo, a veces se pasa por encima de amigos y seres queridos que están a su lado”, explicó Junor.
Además de ello, su papel se vio opacado por la popularidad de Diana y las historias sobre el sufrimiento de ella durante el matrimonio. Carlos terminó siendo un verdadero villano a los ojos de la fanaticada real.