El hecho se registró en Santa Fe, Argentina. Ningún niño merece un trato así.
La guardería “Creciendo Kids” se encuentra en el ojo del huracán. Las mujeres a cargo de los pequeños los agredían física y verbalmente.
Todo se supo cuando los papás de un niño que asistía allí, notaron el cambio de comportamiento de su hijo. Estaba muy temeroso y con mucha ansiedad.
Fue entonces que decidieron colocar un celular en la mochila del pequeño y, con el modo de grabación de voz activado, poder registrar lo que ocurría en la sala de clases. Fueron 3 horas de grabación donde se enteraron del horror por el que estaban pasando los niños.
Gonzalo Franza, el padre, cuenta que su hijo tiene 1 año 8 meses y, desafortunadamente, fue víctima de un terrible trato psicologico de parte de sus cuidadoras.
Se puede escuchar cómo algunas personas amenazan a los niños y los castigan porque ‘no comían bien’. A uno de los pequeños, incluso, lo metieron a un baño y le cerraron la puertas mientras que les tenían prohibido al resto acercarse a él o tendrían el mismo castigo.
Su bebé llevaba dos años yendo a esa guardería y ahora creen que todo ese tiempo su hijo sufrió maltrato. La madre del pequeño asegura que él mismo se pegaba en la cabeza cuando ella lo retaba por algo. También notaron que ya no quería bañarse, le daba miedo el agua e, incluso, entrar a cualquier baño.
Cuando los padres fueron a la guardería para hacer un reclamo confrontaron a la mujer del audio y ella se disculpó porque ese día específicamente andaba con problemas personales y se desquitó con los niños sin darse cuenta. Sin embargo, que encerrara a su hijo no tenía ninguna justificación.
AL final optaron por hacer una denuncia y el jardín ahora está siendo investigado. Sin embargo, según la investigación policial, los niños no presentan ninguna lesión física.
El jardín sigue operando sin problemas.
La denuncia está hecha por el maltrato físico y también psicológico. Pero no se le debe quitar la importancia que tiene la segunda. Los medios de comunicación han hecho eco de la demanda de los padres en contra del jardín.
La recuperación al daño emocional puede tomar mucho tiempo. Los niños deberán a aprender a confiar nuevamente en los adultos que se supone están para cuidarlos y protegerlos. Nadie debe tratar así a los pequeños.
