6 Signos Que Te Advierten Sobre Los Peligros De Las Toxinas En El Hígado

Nuestro hígado es uno de los mejores aliados de nuestra salud, pues elimina las toxinas y tiene más de 500 funciones enumeradas en los libros de medicina. Ya que no queremos descuidarlo ni tampoco que los descuides, en esta oportunidad queremos aconsejarte de la mejor forma posible para que lo cuides.

Hoy hemos preparado para ti una lista de consejos para ayudarte a saber cuándo tu hígado está necesitando ayuda y envía señales para que lo asistas.

 

1. Fatiga crónica

El síndrome de fatiga crónica es muy similar a una enfermedad prolongada similar a la gripe. Por definición, deberás experimentar los síntomas durante al menos 6 meses antes de que puedas ser diagnosticado con el síndrome de fatiga crónica. La razón detrás de esto es la intoxicación del hígado. El hígado, en gran medida, contribuye al suministro de energía en el cuerpo. Convierte la glucosa en glucógeno y la almacena para un uso posterior. Un hígado saludable vierte la glucosa entre comidas o siempre que haya necesidad de alimento y energía. Un hígado enfermo, por el contrario, apenas puede producir glucosa y tiene poco espacio para almacenarla.

 

2. Piel amarilla y ojos amarillos

Si los ojos o la piel de una persona se vuelven amarillos, se le llama ictericia. La ictericia en sí no es una enfermedad, sino un síntoma de posibles disfunciones. Normalmente aparece cuando un hígado enfermo hace que el sistema acumule demasiada bilirrubina, un pigmento amarillo que se forma por la descomposición de glóbulos rojos muertos en el hígado. ¿Adivina qué sucede cuando el hígado no puede eliminar la bilirrubina junto con los glóbulos rojos viejos? ¡Exacto! ¡Te pones amarillo!

 

3. Dolor en el área del hígado

Por lo general es un dolor sordo.La sensación de dolor en el área superior derecha del abdomen es una señal de que tu hígado podría estar en problemas.  Sin embargo, a veces se vuelve bastante intenso. Recuerda que el trabajo del hígado es desintoxicar y ayudar al cuerpo a filtrar los desechos, así como ayudar al cuerpo a transformar los alimentos en productos nutritivos. Cuando el hígado se ve afectado por una enfermedad, no puede operar de manera eficiente, se hincha dolorosamente y el cuerpo envía signos de toxicidad.

 

4. Inflamación de piernas y tobillos

Si ignoras el problema, tu hígado intenta repararse a costa de formar tejido cicatrizal. Mientras más exista, más difícil será para el hígado funcionar. Esto conduce finalmente a la hipertensión portal. Este proceso hace que el líquido se acumule en las piernas (edema). Lo positivo es que la hinchazón es indolora. Puede afectar ambas piernas, las pantorrillas o los muslos. Sin embargo, el efecto de gravedad hace que la hinchazón sea más visible en la parte inferior del cuerpo.

 

5. Subir de peso

Conforme pasa el tiempo, más y más personas empiezan una dieta saludable y hacen ejercicio, pero aún tienen problemas de peso. Si experimentas un aumento de peso que no parece provenir de un exceso de comida o un mal funcionamiento hormonal, es posible que desees hablar con tu médico sobre una posible función hepática inadecuada.

Lo que acontece es que el hígado no puede ocuparse de todas las toxinas que entran (alcohol, endulzantes artificiales, dieta alta en grasas o ciertos medicamentos). Lo único que se le puede ocurrir al hígado es almacenar las toxinas sin filtrar en las células de grasa. Este desastre no te permitirá perder de peso a menos que ayudes a tu hígado a limpiar de tu cuerpo las toxinas.

 

6. Alergias

 

Muy a menudo, las alergias son el resultado de un hígado sobrecargado y lento. Cuando hay demasiadas sustancias que entran al torrente sanguíneo, el cerebro las reconoce como agente alérgeno liberando anticuerpos y sustancias químicas como las histaminas, que provocan erupciones con picor. El hígado sano, a su vez, limpia perfectamente la sangre de todas las moléculas dañinas y elimina el efecto que un alérgeno potencial tiene en el cuerpo

No obstante, siendo muy positivos , no debes desesperarte si has notado síntomas leves de un mal funcionamiento del hígado. En primer lugar, el hígado puede curarse a sí mismo. Solo haz una pausa de un modo de vida acelerado.  La limpieza del hígado se trata de hábitos saludables y para ellos, los científicos también dicen que hay una serie de productos naturales para aumentar el rendimiento hepático. Por esa razón, desde hoy en adelante debes hacer todo lo posible por consumir productos como el té verde, la cúrcuma, el agua de limón, frutas y verduras orgánicas.