Según expertos, el hábito de bañarse todos los días es una cuestión más social y cultural que sanitaria propiamente tal. Es normal que pensemos que si una persona no se baña todos los días puede ser considerada una persona sucia y con mala higiene personal.
No obstante , los científicos afirman que con bañarse dos veces por semana es suficiente para estar saludable. “El cuerpo es una máquina bien engrasada de manera natural. Una ducha diaria no es necesaria”, afirma el Dr. Brandon Mitchell, profesor de Dermatología en la Universidad George Washington, Estados Unidos.
Si bien en relación a la salud, dos veces por semana sería suficiente, cuando hablamos de estética es cierto que puede resultar insuficiente. Sin embargo, reducir a 4 ó 5 veces por semana las duchas en vez de hacerlo diariamente puede traer varios beneficios.
1. La piel
La principal razón para no ducharse todos los días tiene que ver con la salud de la piel. El agua caliente y el jabón generan resequedad en la piel. Por eso, dejar de ducharse diariamente hará más fácil lucir una piel suave.
Además, la piel genera naturalmente aceites que la ayudan a mantenerse sana. El agua caliente arrasa con ellos, y el hecho de tener que volver a empezar todos los días empeora la fortaleza de la piel.
2. El cabello
El aceite que se genera en el pelo nos ayuda a mantenerlo hidratado y fuerte. Al lavar diariamente el pelo con champú, éste se vuelve más frágil, porque eliminamos todos los aceites que lo protegen. Por eso también se encrespará más si lo lavamos diariamente que si no lo hacemos, especialmente en días lluviosos. El cabello no sólo es un elemento estético. En realidad, está diseñado para repeler el agua y el frío y mantener la cabeza caliente el mayor tiempo posible. Por eso, la grasa del cabello tiene una función y no tiene que ver con la suciedad.
3. Sistema inmunológico
Para cuidarse de contraer enfermedades, lo importante es lavarse bien las manos y mantener limpia la ropa, ya que en ella se acarrean los gérmenes. El sistema inmunológico también se puede ver afectado por una ducha diaria. Es que no todas las bacterias del cuerpo son perjudiciales para la salud. “Bañarse todos los días puede perturbar la población de las bacterias de apoyo al sistema inmunológico”, explica el Dr. Mitchell.
4. Permite que se sienta tu olor propio
Varios estudios han comprobado que permitir que tu esencia natural fluya te hace más atractivo. Es que el aroma de las feromonas genera una fuerte atracción sexual. Por supuesto, no estamos hablando del olor a sudor, ya que los olores corporales propios son naturales y, de hecho, dejar que se sientan es una buena idea. Aunque si los olores son demasiado fuertes puedes generar el efecto contrario, tú mismo puedes darte cuenta hasta dónde puedas llegar. Ojalá que nadie tenga que decírtelo.
Imagina la cantidad de tiempo que podrías ahorrarte si dejaras de ducharte un par de veces por semana. Teniendo en cuenta que en todo el proceso de lavado y secado una ducha lleva alrededor de 20 minutos, reduciendo dos duchas a la semana ganarás nada más y nada menos que 35 horas al año. Quizás podrías privilegiar tu desayuno de vez en cuando.
6. El planeta
Ya lo hemos hablado, pero te lo recordamos, una ducha de 8 minutos utiliza aproximadamente 65 litros de agua. Es decir, por cada ducha que tomas sin necesitarla, estás literalmente desperdiciando un montón de ese preciado recurso natural. Si multiplicamos eso por todas las personas del mundo, sin duda es una cantidad exorbitante de agua. Si todos eliminamos aunque sea un par de duchas a la semana, estaremos haciéndole un enorme favor al planeta.