La mayoría de las enfermedades llega con síntomas o señales que son bastante claras y es ahí cuando nos preocupamos si algo nos duele o se hincha, por ejemplo. Casi siempre, alguna parte de nuestro cuerpo o algo en nuestro organismo nos avisa de que algún aspecto no está funcionando como debería. No obstante, existen enfermedades que son muy silenciosas, pero atacan a las personas de manera letal.
El peligro está en que algunas de estas enfermedades son mortales y comienzan a avanzar sin que el paciente se dé cuenta de que las padece. Ahora te vamos a mostrar 3 de estas asesinas silenciosas para que sepas identificarlas. Lo importante es que tomes en cuenta algunos consejos para poder reconocerlas:
Hipertensión arterial
La primera enfermedad silenciosa en nuestra lista es esta peligrosa enfermedad del sistema circulatorio. Es más, la hipertensión en la sangre puede ocasionar un infarto cuando menos lo esperes. Lo más grave de todo esto es que la mayoría de los casos sucede sin ningún tipo de aviso, ni mareos ni dolor, ni cambios que nos den aviso.
Es de suma importancia que se consulte a un médico y con el especialista revisar el historial médico familiar para ver cada cuanto tiempo es conveniente que revisemos la presión arterial. Si no hay antecedentes familiares, revisar una vez al año nuestra presión es suficiente.
A pesar de que es una enfermedad común, quienes la padecen pueden consumir medicamentos y llevar un estilo de vida más sano y de esa manera podrán vivir muchos años.
Diabetes
La única forma de prevenirla es cuidar nuestros hábitos alimenticios, hacer ejercicio regularmente y visitar al médico al menos dos veces al año para evitar riesgos; ya que esta enfermedad aumenta exponencialmente sus probabilidades de atacar a medida que las personas avanzan en edad. Generalmente, después de los 40 años se duplica en personas con sobrepeso. Lo que no significa que un joven que se cuida mucho esté completamente a salvo de diabetes.
Osteoporosis
Esta enfermedad es la última en esta nota por ser las más silenciosa de todas, pero también la más peligrosa. Nos referimos a la llamada osteoporosis. La razón es que en el 90% de los casos, el diagnostico de esta enfermedad ocurre después de que ya ha llegado para quedarse.
La osteoporosis provoca que los huesos se vuelvan débiles y frágiles, es por eso que las caídas y fracturas son mucho más peligrosas para quienes tienen osteoporosis, ya que los huesos no vuelven a soldarse, como normalmente pasaría, sino que se quedan así, porque han perdido su capacidad de unirse nuevamente. Todo esto puede ocasionar infecciones y derrames internos que podrían llevar a la muerte de quien la padece.
Si bien las chances de desarrollar esta enfermedad se incrementan ligeramente con la edad, la mayoría de las veces también puede ser causado por el consumo excesivo de alcohol, tabaco, esteroides y ciertos medicamentos; por eso, la mejor manera de prevenirla es limitando el consumo de dichas sustancias. Un examen óseo al menos una vez al año también ayuda. Así como hemos podido constatar, no todos los enfermos sufren grandes dolores o están en cama. Nunca bajemos la guardia y estemos atentos a nuestro autocuidado y prevención, pues lo complejo de estas enfermedades es que el descuido y la falta de atención son sus más grandes aliadas.
