Te Contamos Lo Que Es El Phubbing Y Por Qué Está Interfiriendo En Las Vidas De Las Personas

Desde hace aproximadamente cinco años, todos hemos sufrido al menos una vez “phubbing” durante una reunión de trabajo o una comida familiar. Esta práctica no tenía nombre nombre hasta hace poco,  pero sus consecuencias eran percibidas por cualquiera. Se inició hacia el año 2007 con el nacimiento del smartphone o teléfono inteligente, que sintetizaba en pocas pulgadas la potencia de un computador.

Con la posibilidad de mantenerse conectado a Internet a cualquier hora y en cualquier lugar, se generalizó esta obsesiva práctica que muchos tienen sin estar al tanto. El “phubbing” (término formado a partir de las palabras inglesas phone y snubbing) consiste en el acto de no prestar atención a quien nos acompaña al prestar más atención al móvil u otros aparatos electrónicos. Esa es la razón por la que algunas prácticas comunes que todos hemos hecho o de las cuales hemos sido víctimas algunas vez, hoy tienen un nombre con el cual distinguirlas.

La aparición del smartphone nos ha traído la posibilidad de tener el mundo en la mano. El problema es que también se lleva toda nuestra atención. A largo plazo, eso desgasta las relaciones y puede incluso arrastrarnos a la descortesía.

 

 

Es probable que te sea familiar la situación. Por ejemplo, estás en una reunión de amigos y te diriges a uno de ellos para preguntarles “tú qué opinas?”. A lo que esa persona responde “sí, sí”, mientras tiene la vista fija en el teléfono. Quizá luego levante la vista y te diga: “¿Me dijiste algo?”.

 

El phubbing en la pareja

 

De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad Baylor, EEUU, el 46,3% de los 463 entrevistados afirmó sufrir phubbing por parte de su pareja. Los especialistas dicen que este no es un dato anecdótico, porque este hábito desgasta la relación y genera muchos conflictos.

Aparte de que reduce el tiempo de comunicación de calidad dentro de la pareja, siendo el diálogo el principal factor para que una pareja perdure en el tiempo. De esa forma el phubbing está arruinando relaciones de todo tipo, y quitando tiempo de calidad a las personas.

El phubbing en la sociedad

 

Algunos datos que se han recopilado hasta la fecha indican que, por ejemplo, casi el 90 por ciento de los adolescentes prefieren el contacto vía texto que cara a cara. Otro dato dice que en los restaurantes se experimentan 36 casos de “phubbing” en cada cena. Y es de esa forma que los teléfonos interfieren en todo tipo de actividades. ¿Es posible solucionarlo?

La verdad es que no seremos optimistas, porque se debe decir la verdad: todos estamos bastante atados a nuestros móviles, y es difícil escapar por completo del “phubbing” como de otros problemas asociados.

 

 

Sin embargo, no todo está perdido, porque lo que sí podemos hacer es buscar algunas alternativas que nos ayuden a mejorar, por ejemplo:

Recomendamos apagar el teléfono para irse a dormir

Se puede regresar al despertador analógico y mejorará la calidad de vida, de sueño y de relación. Imagina irte a la cama con tu pareja sin tener la vibración del móvil importunando todo el tiempo. Además, el brillo del móvil puede afectar tu sueño. Si para ti es demasiado apagar el celular, al menos déjalo en otra habitación, sólo disponible para recibir llamadas. Es un pequeño cambio que puede mejorar mucho tu vida.

Poner Reglas

Por ejemplo, a partir de cierta hora de la noche, ya no se revisa el whatsapp o el celular queda prohibido en la mesa. En una salida de pareja, desconectamos Internet. Por supuesto, no se toca el móvil en el cine, y en la cena mejor que tampoco.  Ese tipo de condiciones pueden mejorar la calidad de tu vida, mientras te mantienen lejos del celular.

 

 

Evitar las notificaciones 

Trata de silenciar todos los grupos  y quitar la opción de recibir notificaciones de todas las aplicaciones. Así tu teléfono sólo sonará para cosas relevantes. Si tienes un tiempo libre y quieres mirar las redes sociales, entonces te enterarás de todos los like que has recibido y demás notificaciones. De esa forma, tú decides cuándo quieres mirar el teléfono, y no estás dependiendo de las notificaciones.