Esta Perrita “Sin Dueño” Vivió Deprimida Y Aislada Por 2 Años, Pero Todo Cambió De Repente

Existen ciertas personas que afirman que los animales se olvidan de sus dueños luego de años de no verse, pero hay quienes piensan que tienen memoria visual. Los expertos estiman que es el olfato el que jamás les fallará. Así, son capaces de reconocer olores e identificar a las personas que alguna vez les dieron tanto amor.

Es lo que pasó con esta perrita que vivía muy deprimida y triste incluso en un refugio rodeada de cariño, hasta que sintió un olor familiar.

Lo que sucede es que el animal había sido encontrado vagando por las calles de Argentina  y fue considerado un perro callejero, y para darle una mejor vida, la persona que lo encontró decidió llevarlo a un refugio de animales llamado Arca.  En ese lugar fue acogido por el personal y comenzaron a buscarle un nuevo hogar para que saliera de las calles.

 

 

Sin embargo, debido a que tenía una personalidad retraída y triste no le interesaba a nadie, así que siempre adoptaban a otros perros más jóvenes y alegres que ella. Al cumplir 2 años viviendo en el refugio, decidieron que era hora de poner sus fotos en internet, así que le tomaron una fotografía y la publicaron intentando que alguien se interesara en ella nuevamente.

 

 

Sin siquiera haberlo soñado, de repente llegó un mensaje de una mujer que decía que la perrita era de su hijo y que la habían estado buscando durante mucho tiempo.

Explicaba que se había escapado de casa y no habían podido encontrarla. Resultó ser que era Ariel Naveira el verdadero dueño de la perrita y estaba muy emocionado y feliz con su regreso.

Por eso, al día siguiente, a primera hora, fue al refugio para encontrarse con Pakita, su amiga de 4 patas. Los encargados del refugio le pusieron una correa y la sacaron a pasear, y como siempre, estaba retraída, algo dudosa y ni siquiera había notado la presencia de Ariel.

No obstante, él no aguantó la incertidumbre y que no lo reconociera, así que la llamó para que se acercara, y ella tímida, fue con la cola entre las piernas. Al principio, parecía no reconocerlo,  hasta que lo olfateó.

Fue en ese minuto cuando su personalidad cambió y comenzó a dar saltos de felicidad intentando abrazar a su dueño, quien permanecía totalmente emocionado por haber encontrado.

 

 

El personal del refugio no podía más con tanto amor entre ambos y después del reencuentro, Ariel se llevó a Pakita a casa y ambos están muy felices de que todo haya vuelto a la normalidad. Es una hermosa historia de amor incondicional.

 

 

Este es el emotivo video en el momento que reconoció a su dueño: